En un ejercicio de rendición de cuentas frente al Congreso de la CDMX, la alcaldesa de Tláhuac, Berenice Hernández Calderón, soltó la neta: Tláhuac le da un chorro a la ciudad, pero la ciudad no le está regresando lo justo.
¿Y el agua pa’ cuándo?
Uno de los temas más urgentes: el agua. De acuerdo con Berenice, la red hidráulica en Tláhuac tiene más años que muchos de nosotros (50, para ser exactos), y eso se traduce en fugas, baja presión y un sistema que ya no da una. Encima, uno de los pozos clave (el de Tecómitl) está fuera de operación, y una planta potabilizadora se cayó desde 2019. Resultado: escasez y broncas para que llegue el agua a las casas.
¿Qué se está haciendo? Reparten pipas casa por casa, buscan rehabilitar la red completa y están pidiendo apoyo urgente porque, literal, ya no se puede más con lo viejo.
Tláhuac: el pulmón del sur que pocos pelan
A ver, Tláhuac no solo es tierra de chinampas y volcanes épicos (como el Teutli o el Ayaquémetl), también es un pulmón verde que ayuda a toda la ciudad. Hay humedales, aves únicas, campos agrícolas y un montón de biodiversidad que está bajo presión por la urbanización.
La alcaldesa pidió NO comprar terrenos en zonas rurales para evitar que la mancha urbana se coma todo. “Tláhuac es estratégica para el futuro ambiental de la ciudad”, dijo. Y tiene toda la razón.
Mercados renovados, festivales seguros y más impulso a lo local
Los 18 mercados públicos de la demarcación ya están recibiendo manita de gato con mejoras eléctricas, drenaje y todo lo necesario para que no te den un calambre mientras compras tu kilo de jitomate.
También armaron el operativo “Festividad Segura”, que le pone orden a más de 200 fiestas patronales. Spoiler: sí hay Ley Seca, pero también seguridad para todos.
Y para apoyar a los productores de la zona, están haciendo ferias, puntos de distribución y hasta alianzas con la Central de Abasto. Lo local es lo de hoy.
Y para los que buscan echar a andar un negocio, también hay buenas noticias: con el programa “Oficios para la Vida”, ya hay mujeres aprendiendo profesiones y emprendiendo con apoyo económico. También va caminando una Escuela de Enfermería que ya va en su segunda generación.
Seguridad, juventud y salud: combo ganador
¿Te late la idea de caminar sin miedo? Pues Tláhuac también anda en eso con su programa “Senderos Seguros”, que busca iluminar cada rincón para que las calles sean espacios de paz y no de sustos.
Además, hay programas para apoyar a las y los jóvenes: cursos, talleres, oficios, arte, música, deportes y más. La alcaldesa fue clara: “Los jóvenes no son el futuro, son el presente”. Y en esa línea van con clínicas de salud integral, entrega de medicamentos, servicios dentales y apoyo para personas con discapacidad.
Obras, empleo y hasta apoyo para funerales
Sí, también están chambeando en infraestructura: reparaciones de fugas, mantenimiento de redes de agua y drenaje, limpieza de calles, balizamiento y más.
Y si hablamos de chamba, ya están impulsando ferias de empleo, cursos para emprendedores y programas como “Oficios para la Vida”, que capacita principalmente a mujeres en oficios útiles y les da un empujón económico para que sean independientes.
Hasta hay un programa de “Sepelio Digno” para apoyar a familias en momentos difíciles.
Tláhuac está rifándose con todo para transformar la alcaldía, pero necesita apoyo real de toda la ciudad. Da agua, aire y alimentos… ¿y qué recibe a cambio?
La alcaldesa lo dijo fuerte y claro: “Tláhuac merece reciprocidad”.
Así que ya sabes: si no volteabas a ver Tláhuac, es momento de hacerlo. Y si eres parte de ella, ahora puedes sentirte un poquito más orgulloso/a de lo que está pasando en tu alcaldía.
